No la conocÃa pero resulta que, según Incognisis (un blog en español que cae dentro de la categorÃa de favoritos), fue escrita en marzo de 1985. Es un poco larga quizás pero su lectura debiera ser obligatoria en cualquier escuela de ingenieros de software.
Érase una vez que, sin saber nada la una de la otra, la “Automated Accounting Applications Association†y la “Consolidated Computerized Capital Corporation†decidieron que necesitaban el mismo programa informático para proporcionar cierto servicio.
Automated contrató a un analista programador, Alan, para solucionar su problema.
Mientras tanto, Consolidated decidió pedir a un programador de bajo nivel recién contratado, Charles, que abordase la tarea para ver si era tan bueno como él decÃa ser.Alan, que tenÃa experiencia en proyectos complejos de programación, decidió utilizar la metodologÃa de diseño estructurado PQR. Con esa idea en mente, le pidió a su jefe de departamento que le asignara otros tres programadores para formar un equipo de programación. A continuación el equipo se puso a trabajar y a producir tanto informes preliminares como análisis del problema.
En Consolidated Charles dedicó algún tiempo a pensar en el problema. Sus compañeros de trabajo se dieron cuenta de que a menudo Charles se sentaba con sus pies sobre la mesa mientras se tomaba un café. Ocasionalmente se le vio frente a su terminal, pero su compañero de oficina podÃa deducir por la pulsación rÃtmica de las teclas que en realidad estaba jugando a Space Invaders.
Por entonces el equipo de Automated estaba comenzando a picar código. Los programadores pasaban la mitad de su tiempo escribiendo y compilando código, y el resto de su tiempo en reuniones, debatiendo sobre las interfaces que debÃa haber entre los distintos módulos.
El compañero de Charles notó que por fin habÃa abandonado Space Invaders. En lugar de eso ahora invertÃa su tiempo en beber café con sus pies encima de la mesa y en hacer garabatos en pedacitos de papel. Sus garabatos no parecÃan tener relación con las Tres-en-raya, pero tampoco es que tuvieran mucho más sentido.
Pasaron dos meses. El equipo de Automated por fin publicó una hoja de ruta. En otros dos meses tendrÃan una versión de pruebas del programa. Tras eso vendrÃa un periodo de dos meses de evaluación y mejora que deberÃa llevar a una versión completa.
El jefe de Charles ya estaba cansado de verle holgazanear. Decide enfrentarse a él. Sin embargo, nada más entrar en la oficina de Charles se sorprende al verle muy ocupado introduciendo código en su terminal. El jefe decide posponer la confrontación, asà que charla brevemente con él y se marcha.  Sin embargo, comienza a vigilar más de cerca a Charles para que en cuanto se presente la ocasión pueda enfrentarse a él. Como no tiene muchas ganas de tener una conversación desagradable, está encantado de que Charles parezca estar ocupado la mayor parte del tiempo. Incluso se le ha visto retrasar la hora del almuerzo y también quedarse a trabajar más allá de su hora de salida dos o tres dÃas a la semana.
Al cabo de tres meses, Charles anuncia que ha completado el proyecto. Entrega un programa de 500 lÃneas. El programa parece estar escrito de forma clara, y al ser evaluado hace todo lo que se requerÃa en las especificaciones. De hecho, incluso tiene algunas caracterÃsticas adicionales muy convenientes que podrÃan mejorar de forma significativa la usabilidad del mismo. El programa se pone a prueba y, salvo por un despiste que corrigen rápidamente, funciona bien.
El equipo de Automated ya ha completado dos de los cuatro módulos principales del programa a estas alturas. Esos módulos están siendo sometidos a pruebas mientras que el resto de módulos se finalizan.
Tras tres semanas, Alan anuncia que la versión preliminar está disponible una semana antes de lo que marcaba la planificación. Proporciona una lista de defectos que espera corregir. El programa se pone a prueba. Los usuarios detectan varios errores y defectos aparte de los registrados por Alan. Como Alan explica, eso no es ninguna sorpresa. Después de todo, esta es una versión preliminar en la que los errores son esperables.
Después de dos meses más, el equipo termina de programar la versión de producción del programa. Consiste en cerca de 2.500 lÃneas de código. Al evaluarlo parece satisfacer la mayorÃa de las especificaciones originales. Se han omitido una o dos caracterÃsticas, y el programa es muy exigente en el formato de sus datos de entrada. Sin embargo la empresa decide implantar el programa. Siempre podrán formar al personal de entrada de datos para introducir esos datos en el formato estrictamente necesario. El programa se pasa a varios programadores de mantenimiento para que incorporen en algún momento las caracterÃsticas que faltan.
EpÃlogo
Al principio el supervisor de Charles se muestra impresionado. Sin embargo, a medida que analiza el código fuente se da cuenta de que el proyecto era en realidad mucho más simple de lo que habÃa imaginado inicialmente. Ahora parece evidente que esto no era ningún reto, ni siquiera para un programador novato.
Charles ha producido cerca de 5 lÃneas de código al dÃa. Quizás ligeramente por encima de la media. Sin embargo, considerando la simplicidad del programa, no se trata de nada excepcional. Además, su supervisó tomó en cuenta que habÃa pasado dos meses holgazaneando.
En su siguiente revisión de sueldo a Charles le dan un aumento que era cerca de la mitad de la inflación durante ese periodo. No se le dio ningún ascenso. Cerca de un año después Charles dejó de estar motivado y abandonó Consolidated.
En Automated, Alan fue felicitado por terminar el proyecto a tiempo. Su supervisor le echó un vistazo al código. A los pocos minutos de hojearlo observó que los estándares de la empresa relacionados con la programación estructurada se habÃan respetado. Sin embargo, dejó de revisar el programa rápidamente; parecÃa bastante incomprensible. Se dio cuenta de que el proyecto era mucho más complejo de lo que a él le habÃa parecido inicialmente, y felicitó de nuevo a Alan por su logro.
El equipo produjo unas tres lÃneas de código al dÃa por cada programador. Una cifra por encima de la media pero que considerando la complejidad del problema podrÃa ser considerada como excepcional. A Alan se le dio un considerable aumento de sueldo, se le ascendió a Analista de Sistemas y se le dio una recompensa por su labor.
Al leerla no solo me hizo mucho sentido aquello que en tertulias con colegas muchas veces hemos coincidido, y es que los desarrolladores de software habitualmente no nos vendemos bien frente a nuestros pares, ni menos frente a ejecutivos, jefaturas y clientes.
Pero la parábola no se queda ahÃ. También me hace sentido desde el como los liderazgos logran ver mas allá de lo formal y evidencian aquello que resulta esquivo a primera vista: El talento que se esconde bajo una gruesa capa de ñoñes, inmadurez, exentricidad, incapacidad para relacionarse con otros seres humanos y quizás que otras manÃas extrañas.
En el ámbito de la tecnologÃa la fauna no solo es diversa, las nuevas generaciones suman nuevas tendencias y comportamientos que los sociólogos catalogan y clasifican con una letra: Generación X, Y, Z, etc.
En fin, los nuevos desarrolladores nos presentan nuevos desafÃos!